Fondo Concursable ALIADOS: obras compartidas, cambios reales
En zonas de ladera, donde el entorno desafía y motiva a encontrar soluciones colectivas, y en comunidades donde un parque o una losa deportiva es un espacio vital de encuentro y apoyo comunitario, surge una iniciativa que demuestra que la infraestructura, cuando se construye con propósito, puede transformar vidas. El Fondo Concursable ALIADOS, impulsado por la Asociación UNACEM con el apoyo de UNACEM, marca un camino firme hacia el desarrollo sostenible con protagonismo comunitario.
Más que un fondo, ALIADOS es un modelo de cofinanciamiento y gestión participativa que articula a organizaciones vecinales, gobiernos locales y el sector privado, para responder de forma concreta a una misma pregunta: ¿cómo logramos que las comunidades más vulnerables tengan acceso a infraestructuras seguras, funcionales y sostenibles?
La respuesta está en el modelo: convocatoria abierta, evaluación meritocrática, cofinanciamiento estratégico y acompañamiento técnico continuo.
21 proyectos que comienzan a cambiar realidades
En su edición 2024-2025, el fondo aprobó 21 proyectos comunitarios en los distritos de Villa María del Triunfo y Pachacámac, beneficiando a aproximadamente 80,000 vecinos. Las obras seleccionadas: muros de contención, losas deportivas, escaleras y locales comunales, no solo cierran brechas de infraestructura básica, sino que reconfiguran los espacios colectivos, activan el tejido social y mejoran la calidad de vida de miles de familias.
Cada etapa del proceso está diseñada para fortalecer el liderazgo local. Desde la formulación técnica de los proyectos hasta la ejecución misma de las obras, los dirigentes y vecinos involucrados reciben herramientas, conocimientos y acompañamiento. Así, la obra física se convierte también en una plataforma de aprendizaje y empoderamiento ciudadano.
Uno de los pilares de ALIADOS es su comité evaluador, conformado por profesionales de la academia, la sociedad civil y el sector público. Gracias a esta mirada externa, se garantiza que cada sol invertido esté respaldado por criterios de viabilidad, impacto social y sostenibilidad a largo plazo.
Lo que viene: más proyectos, más alianzas, más impacto desde lo local
El valor más profundo de esta iniciativa no se mide solo en metros de concreto o áreas intervenidas. Se mide en confianza restaurada, en comunidades que vuelven a reunirse para tomar decisiones, en organizaciones sociales que pasan de gestoras de necesidades a impulsoras de soluciones. Se mide en el impacto invisible pero fundamental que tiene saberse escuchados, acompañados y capaces.
Con una nueva convocatoria programada para el segundo semestre del 2025, ALIADOS se proyecta como un mecanismo escalable, replicable y abierto a nuevas alianzas. Porque cuando los proyectos nacen desde la base y se fortalecen con conocimientos técnicos, el desarrollo deja de ser una promesa para convertirse en una experiencia compartida.
